Dentro de la teoría del "Pesimismo cultural" se propone una nueva forma de sociedad basada en los llamados cánones del "multiculturalismo" (neomarxismo) en que se legitima de distintas formas aquellas subculturas y las llamadas minorías. La tribu urbana se concibe además, desde la categoría sociopolítica de lo "asistémico", es decir a partir de la horizontalidad social (rompe con todo lo jerárquico). Desde la ideología de la "deconstrucción" (Michel Foucault), la estructura social vigente comienza a promover por medio del acratismo la autonomía y la autogestión, promoviendo la desaparición paulatina del concepto de Estado-Nación unitario. De esta manera desde la "microfisica del poder" se produce ese "empoderamieto" del poder para tomar el control de sí mismo, abolición de la familia tradicional y autoritaria, luego el barrio y más tarde la ciudad. Es la instauración de la fragmentación. Y es la transgresión cultural o mejor dicho la desacralización de "totems culturales"(Strauss) el medio de ir deconstruyendo el sistema vigente que es sinónimo de opresión y de represión que se expresan por medio de los rayados callejeros, con graffitis (Derrida sostiene que con el neolenguaje busca liberarse del concepto de "ser", donde solamente debe actuar el voluntarismo), Góticos, Punks, Neonazis incluso la delincuencia legitimada como expresión política.
¿Cómo se difunden?
La expansión de estas nuevas “tribus urbanas” se realiza por el cibermundo, se organizan y difunden a través de internet. Por ello no son fenómenos regionales ni aislados, sino que tienden afectar a grandes sectores del mundo globalizado, en especial las naciones más digitalizadas. Al mismo tiempo, tienen índices elevados de rupturas familiares, drogadicción y violencia juvenil, malformaciones sociales que -tenemos que verlo claro- a su vez gatillan el auge del fenómeno tribal urbano.
¿Quiénes se identifican con estas tribus urbanas?
Son siempre muy jóvenes, los números cada día van mas en aumento, en su mayoría son adolescentes, que tienen en promedio 14 años; por lo tanto en muchos casos están viviendo la crisis de la personalidad; también hay otros que se unen con más edad, pero el limite son los 22 años aproximadamente.
¿De dónde vienen?
Han nacido en familias pequeñas, a los más de dos hermanos. Sus padres trabajan mucho; por tanto, la vida familiar es muy reducida y la soledad es parte de su cotidianidad; pasan también largas horas en Internet y en consecuencia su socialización se realiza a través del ciber-mundo. Prefieren el chat a una conversación cara a cara, a veces más en contactos efímeros con desconocidos que con amigos íntimos; muchos de ellos provienen de familias disfuncionales, que han sido destruidas por la plaga del divorcio. Por lo tanto su sentido de estabilidad familiar y emocional es bien reducido. Otros vienen de familias sin mayores problemas, pero son llevados a estos grupos por la influencia del entorno y de la moda, pues, como están en la edad de búsqueda de la personalidad, el grupo los arrastra.
Las causas de la expansión de las tribus urbanas: la crisis en la familia
La falta de un modelo familiar fuerte, con una familia más amplia, que incluya abuelos, primos, tíos, etc., crea personalidades que no se identifican con sus raíces. Los niños que viven el drama del divorcio de sus padres buscan muchas veces refugio en estas tribus, tratando de encontrar la respuesta y el apoyo que sus padres no les pudieron o no quisieron dar. Todo esto es agravado por la falta de comunicación en el hogar postmoderno, que es una de las causas más comunes en las rupturas familiares. Esto se agudiza con los nefastos modelos de comportamiento expandidos por la TV, que a través de la violencia, la erotización y el sadismo envenenan las almas de los jóvenes.
Estas condiciones adversas afectan directamente la formación de la identidad y de la moralidad del joven de hoy, quedando expuesta su personalidad a un sentimiento casi errática de búsqueda de modelos, como es natural en la adolescencia. Sin embargo, aquí se da otra característica, que es querer diferenciarse lo más posible de lo que son sus padres, porque les fallaron en acompañarlos y educarlos rectamente en las virtudes más básicas, como la fe, la templanza, la fortaleza y la sabiduría. La búsqueda desesperada de esto adolescentes de “ser distintos a sus progenitores” produce un contexto de diferenciación y ruptura, agudizado por la rebeldía de la edad, lo que los lleva a considerar a las tribus urbanas como una nueva forma de vida familiar, donde son acogidos y sus sentimientos de pertenencia son saciados. En medio de la crisis emocional, moral y cultural que los rodea, juzgan a estas “tribus urbanas” como alternativas verídicas para ser distintos; y por lo tanto rompen con sus padres y el mundo en que éstos viven inmersos. En estas tribus encuentran ese cobijo que faltó en el seno familiar. Las tribus urbanas son grupos de socialización que cobijan, y esto se expresa de muchas maneras, pero una en particular es en la forma estética. No olvidemos que vivimos en la cultura de la imagen. Así el modo de vestir, el pelo, los piercings, etc., se transforman en los lazos -que representan la sangre- que los une a la tribu; y al mismo tiempo es la forma de protesta contra el mundo de sus padres, a quienes culpan de manera consciente o subconsciente de su sufrimiento. Así toda esta ruptura con el mundo de sus padres se representa estéticamente a través del uso de formas de agresión corporal como los piercings, expansiones y tatuajes chocantes. También sufren los cabellos, ya que se someten a colores surrealistas. Una porción mayoritaria tienen como ideario la promiscuidad sexual, y tienden a la bisexualidad, sobre todo las tribus urbanas más nuevas, como los “chicos modernos”, los “visual key”, “emos” y “chicas suicidas”
La revolución sexual, seres públicos, sin intimidad ni libertad.
En el deseo de volverse públicos, en estas nuevas tribus urbanas se proclama el amor libre, o sea, cualquier puede poseer sexualmente a quien le plazca, sin importar el sexo ni la condición. Aquí se da en los grados mas bestiales, dando paso a las formas anárquicas de sexualidad, principalmente en la bisexualidad, por lo tanto los comportamiento homosexuales son consecuencia de esta anarquía pasional. Todo este desquite de los sentidos y especialmente el placer sexual descontrolado los empuja a la promiscuidad completa. Por eso los índices de estabilidad emocional son bajísimos, porque entienden que no pueden llevar adelante el conocimiento del otro, pues viven en un sentido de ocupar a los demás, son meros objetos, por lo tanto no quieren amar verdaderamente a personas. Esto les causa pena, sentimientos melancólicos fuertes, pero no quieren encontrar el motivo ni enfrentarlo, como cualquier ser con una moral básica sana, que se vuelca a la religiosidad, a la búsqueda de Dios. En vez de volcarse a esta búsqueda trascendente, se vuelven al culto del sentimiento de tristeza, hacia la melancolía, y aceptándola, terminan en las formas extremas de depresión que muchas veces sufren. Tenemos que decir que la degradación moral, social y cultural del Occidente es un caldo de cultivo para estas tribus urbanas, que muchas veces se mezclan con ideologías sanguinarias, como grupos neo-nazis, comunistas anarquistas, punk-antifascistas, etc. Últimamente en nuestro país estos grupos han sido protagonistas de hechos gravemente violentos y están siendo los principales causantes de un gran número de gente muerta, herida y mutilada, pues su forma de expresión incluye la violencia contra el prójimo.